Por: Carolina León, Diario Financiero
A lo largo de la historia, son diversos los oficios que han ido desapareciendo producto de los avances industriales y tecnológicos de la sociedad. Serenos, lecheros, ascensoristas y vendedores de mote son empleos que ahora solo se pueden conocer leyendo libros de historia o realizando búsquedas en internet.
Pero el avance tecnológico no solo implica dejar atrás algunos oficios y empleos. El cambio también va de la mano con la aparición de nuevas necesidades, lo que da espacio a nuevos perfiles laborales.
Las agencias y firmas reclutadoras de talento han sido testigos en primera línea de este fenómeno y cuentan cómo la pandemia agudizó la necesidad de nuevas habilidades laborales en algunas industrias.
“Según nuestros sondeos, alrededor de un 65% de los profesionales de recursos humanos confiesa que la automatización y las nuevas demandas a raíz de la pandemia destruirán puestos de trabajo de los que conocemos en la actualidad, pero creará en igual medida otros diferentes, ampliando el abanico de posibilidades de los trabajadores del futuro”, dice Xavier Michel, director comercial de la multinacional de recursos humanos Adecco.
La masificación de la tecnología, a través de dispositivos como smartphones, tablets y computadores, dio espacio a que paulatinamente las firmas comenzaran a identificar nuevas necesidades internas, lo que dio origen a nuevos puestos de trabajo.
“El nuevo estilo de vida ha potenciado el e-commerce y las entregas, la banca digital, la telemedicina y la formación por internet, y creará oportunidades laborales, con una alta demanda de perfiles vinculados al audiovisual en línea. La banca también se ha reformulado, y ha incorporado más profesionales con conocimiento de softwares o TI, para dar soporte a distancia“, explica Danilo Rojic, socio director de People & Partners, firma dedicada al liderazgo y desarrollo de carrera.
Una mirada similar da Xavier Michel, quien señala que el sector tecnológico y de I+D+i liderarán la creación de nuevos perfiles laborales. “La tecnología y la inversión en desarrollo e innovación propiciarán la creación de nuevas oportunidades de empleo, especialmente aquellas vinculadas a la biotecnología y el e-commerce”, asegura.
¿Qué puestos laborales han comenzando a hacerse espacios? Según la firma reclutadora DNA Human Capital, la lista es variada: encargado de diversidad, equidad e inclusión; consumer success (asesor de clientes); data scientist; data analitics; full stack; entre otros, son algunos de los nuevos trabajos que demanda el mercado laboral.
Y no es lo único, de acuerdo a Rodrigo Gorostiza, gerente de marketing Trabajando.com, ya que cada vez son más requeridos los cargos ligados a temas de inteligencia artificial, big data, internet of things, analítica avanzada de datos, marketing digital, user experience, desarrollo de productos digitales / programación (Front, Back y FullStack), entre otros.
Sin embargo, no sólo se trata de perfiles laborales 100% nuevos, sino que también de nuevas habilidades. “Más que nuevos cargos son roles más amplios y transversales”, plantea Gorostiza.
Su punto es respaldado por Hugo Díaz, branch manager inhouse services de Randstad, quien agrega que los oficios ya existentes, como los bodegueros, están demandando nuevas herramientas. “El bodeguero que existía cambió completamente a raíz del e-commerce, ahora las empresas quieren que esa persona tenga experiencia en picking radiofrecuencia, que es un sistema muy utilizado en la logística. Por lo tanto, su perfil y habilidades cambiaron, ya no es lo de antes”, ejemplifica.
Al interior de la Asociación de Seguridad Privada y Transporte de Valores (Aseva), son testigos del fenómeno descrito por Garostiza y Diaz.
“En el caso del rubro de la seguridad privada, en el último tiempo el manejo de software de sistemas de seguridad electrónica y monitoreo están requiriendo de personal con cierta especialización técnica. En este caso, los guardias de seguridad están siendo capacitados, naciendo así un nuevo tipo de trabajador, con más conocimientos y habilidades”, cuenta Aldo Vidal, miembro del Comité Técnico y vocero de Aseva.
Y no solo se trata de contar con trabajadores capacitados en nuevas habilidades, sino que también de contar con jefaturas con habilidades blandas y de liderazgo. Así al menos lo plantea Rojic.
“Esto significa poder predecir, aunque sea en un mínimo porcentaje, qué podría pasar, para tomar o no un determinado plan de acción, lo cual requiere de una formación continua en avances tecnológicos, desarrollo de pensamiento crítico, capacidad de negociación, creatividad y resolución de problemas complejos”, dice el vocero de People & Partners.