Por: Alejandra Rivera, Diario Financiero
En 2011, el ingeniero civil industrial de la Universidad Católica, Andrés Silva, cofundó junto a María Paz Gillet, Happyshop, una aplicación tecnológica de marketing digital que juntaba a clientes y marcas de retail para dar a conocer ofertas. En su época fue toda una novedad, pero a pesar de lo disruptivo y la inyección de US$ 6 millones que recibió de Aurus Capital e inversionistas como Wencesleo Casares, la startup bajó la cortina en 2013.
Silva siempre ha deambulado entre el mundo emprendedor y el de las grandes empresas. Lideró la estrategia digital de Paris, luego emprendió con Maxi Auto, Carscan y Folder and Flight, hasta que llegó Happyshop. Esta última apuesta no resultó bien, lo que atribuye a la precocidad de la idea y la calidad de las conexiones de Internet que dificultaban descargar los cupones de descuento, luego aterrizó en 2015 en Banco Santander, para liderar el área de Banca Digital.
En plena pandemia decidió teletrabajar desde Francia. El 31 de agosto de 2020 se instaló en Fontanbleu, con su esposa y cinco hijos. La idea -dice- era que los niños aprendieran francés, teletrabajar para Santander y cursar un segundo MBA en la escuela de negocios Insead.
Desde su home office en la casa que arrendó a 45 minutos de París -cuenta vía telemática- que finalmente, por temas de tiempo dejó su puesto gerencial en la banca y hace seis meses es senior advisor para Latinoamérica de GrowthWork. Esta empresa -basada en Madrid y especializada en venta de firmas tecnológicas medianas- estuvo detrás de la venta del portal de avisos clasificados de la noruega Adevinta, Yapo.cl -con sede en Chile- el que finalmente adquirió Frontier Digital Ventures (FDV) por US$ 19,5 millones.
“Cuando llegué a GrowthWorks las negociones para la venta de Yapo.cl estaban muy avanzadas y mi rol fue más de espectador, me tocó prospectar a otros clientes que estaban interesados en comprar, pero ya había un comprador con una ventaja, porque había adquirido otras filiales de Adevinta en Colombia y le interesaba la de Chile”, cuenta.
Silva comenta que en paralelo, está asesorando a empresas en temas digitales y en aspectos financieros a la FinTech chilena, Red Capital, a quienes los está ayudando a levantar una ronda de financiamiento de capital serie B para expandirse a nivel regional.
“En Chile estamos muy centrados en el mercado norteamericano. Los fondos de inversiones y el sector Hi tech y FinTech de esta región crecen de manera dinámica y son cada vez más globalizados. Esta tendencia es muy notable en Francia, que acaba de suplantar a Alemania como segunda plaza europea en inversiones Hi tech, apenas detrás de Inglaterra”, señala.
El ingeniero dice que las ganas por emprender siempre están. Y aunque no quiere revelar detalles, adelanta que está evaluando un negocio en el área FinTech junto a otros socios.
Consultado por la dificultad en el reemprendiento, afirma que “es más fácil, lo más difícil es la primera vez, cuando tienes un trabajo establecido y estás acostumbrado a que te paguen un sueldo todos los meses y te tiras al vacío, esa es con pánico, después a uno le queda gustando”, afirma Silva.