Por: Vicente Vera V., Diario Financiero
Una nueva generación está entrando al mundo financiero y no son los millennials, sino los centennials o generación Z, todas aquellas personas nacidas a partir de 1997. De acuerdo a cifras de Rave Raviews, un 64% de este grupo etario indica que está buscando planes de ahorro: comienzan a los 13 años en este proceso.
Los postmillennials tienen claro que planificar su futuro financiero es algo clave, pues el 89% declara que realizar dicho plan los hace estar más empoderados para tomar decisiones en sus vidas.
Al momento de ver la penetración de productos y servicios financieros, el 60% tiene una cuenta de ahorro, el 54% posee cuenta corriente y un 32% tiene tarjeta de crédito. Además, el 33% posee seguros de salud.
El director global de Marketing de Latinia, Oriol Ros, explica que si bien la generación Z no tienen una gran capacidad de ahorro, destaca por tener una actitud proclive para hacerlo.
Ros cree que actualmente las entidades financieras no están sacando provecho de los llamados millennials. “Ya son rentables; es recomendable centrarse en la generación Z. Los jóvenes de este nuevo target se caracterizan por ser nativos digitales ya que no conocen otra realidad e incluso no recuerdan la crisis financiera de 2008”, dice.
El experto de Latinia señala que los centennials pueden significar para los bancos un nuevo espacio por explorar aún muy virgen, ya que esta generación se encuentra al principio de su vida financiera.
Desde Latinia recalcan que si bien los millennials en el corto y mediano plazo, es uno de los segmentos más rentables para la banca, las fichas deberían moverse hacia los centennials.
Ros dice que la generación Z ofrece “una oportunidad para que las instituciones financieras se puedan diferenciar”. Esto, pues “la oferta sigue siendo demasiado igual para el mayor porcentaje de entidades financieras”, sostiene Ros.
El experto apunta a que en la medida en que haya bancos o instituciones financieras que “no hayan hecho una especial reflexión estratégica sobre los millennials, tienen una ventaja competitiva si comienzan a pensar en el siguiente público, los centennials”.
A su juicio, la industria debería enfocarse para atender a este segmento a través de managers de finanzas personales, con el objetivo de otorgar un asesoramiento financiero, ya que este grupo etario está más inclinado al ahorro que al endeudamiento, manifiesta Ros.
Una de las diferencias entre los centennials y los millennials, es que a los últimos “nos les interesaba tanto los productos o servicios que les ofrecía el banco. La generación Z quiere ser educada financieramente y consumirán contenidos en ese sentido. Cualquier banco que ofrezca estos productos va a encontrar un espacio para su propuesta”, dice Ros.